Esta vez os vengo a hablar sobre la adictiva serie Stranger Things. El argumento de gira alrededor de un grupo de niños de unos 12 años y uno de ellos desaparece misteriosamente sin dejar rastro. Durante la busqueda de este, los niños, familiares y la polica decubren que algo estraño ocurre en el pueblo, a demás se encuentran con una niña muy extraña.
El primer capítulo me llamó la atención y me surgió la necesidad de saber que pasaba, por lo qué era capaz de verme unos tres capítulos al día. Me tenía muy enganchado.
La siguiente temporada en general no me parece mala, pero no es tan buena como la anterior. Se me hizo un poco pesada en algunos momentos, en especial la trama de Once. La historia de este personaje era entretenida y te dejaba con ganas de conocerla, de hecho, cuanto más sabía sobre ella más empatizaba. Pero en los últimos capítulos, cuando se marcha del pueblo, me pacerían un tanto tedioso y no me decía nada. Mi visión sobre ella volvió a cambiar en el ultimo capítulo que compensó un poco los anteriores.
Mike me caía bien por ser una persona amable y comprensiva con Once, mientras que Lucas era todo lo contrario e intentaba que la echaran del grupo. Y en la segunda temporada es al revés, Lucas y Dustin quieren que Max forme parte de la pandilla, pero Mike no. Puedo entender que rehuse de Max pero a la larga su actitud me resulta muy pedante e infantil (tiene doce años es lo que hay) porque ella no tiene la culpa de nada. Esto tampoco quita que Lucas se comportase mal con Once. Dustin simplemente me hace gracia y me cae bien.